Tras una primera edición que dejó a sus organizadores un sabor de boca “inolvidable” y un listón “muy alto”, el Premio Periodístico Concha García Campoy recoge candidaturas hasta el próximo 18 de marzo para regresar al candelero periodístico y dar visibilidad a una especialidad de la profesión, y a los trabajos que destacan en ella por su calidad, que suele pasar desapercibida en los grandes medios de comunicación: la de salud.

Las cuatro categorías existentes son Radio, Prensa escrita, Periodismo digital y Televisión, siendo esta última una de los más valoradas por la organizadora, la Academia de las Ciencias y las Artes de la Televisión, ya que reconoce la excelencia en trayectorias profesionales o piezas periodísticas relacionadas con la investigación, la divulgación científica o la salud.

El jurado de este evento está formado por los hijos de la periodista que le da nombre, Lorenzo y Berta Díaz García-Campoy; el presidente y los vicepresidentes de la Academia; una personalidad de la ciencia; Joan Serra, director del Diario de Ibiza; Elsa González, presidenta de la FAPE, y Luis del Olmo, presidente de honor de la Academia de la Radio, además de otros periodistas de la talla de Manuel Campo Vidal, María Escario, Elena Sánchez, Olga Viza, Ángeles Caso y Pepe Carbajo.

El panorama actual del periodismo español

Lorenzo Díaz García-Campoy (@lorenzodiazgc), periodista y uno de los vástagos de la desaparecida profesional de la información, valora que en una época como la de hoy en la que, “por pura necesidad”, prima “un periodismo instantáneo” y una “actualidad frenética, en la que apenas hay tiempo para el análisis y la reflexión”, es importante encontrar un equilibro que permita recuperar esta necesidad periodística y combinarla con la noticia. “Hay una crisis del modelo periodístico y la llegada de Internet no está siendo fácil para nadie, lo que se convierte en el reto más difícil que se le presenta al sector para los próximos años”, añade Díaz García-Campoy.

La figura de una periodista reflexiva

Mi madre demostró que se puede hacer periodismo de muchas maneras y que no tiene por qué consistir en un combate de boxeo entrevistador-entrevistado, que es un modelo que ahora vemos muy a menudo”, destaca el periodista. Una manera de trabajar respetuosa y reflexiva con la que conseguía sacar lo mejor de cada personaje, como añade, y con la que puso en valor el papel femenino en la profesión. “Supo hacerse su hueco y, junto a otras grandes periodistas, marcar el camino y hacerse respetar en el gremio”, concluye el miembro del jurado del evento.

Foto: Marga Ferrer