Un reconocimiento al periodismo “con cabeza y con corazón”, al periodismo “de personas para personas”. Es la síntesis que ofrece el director general de la ONCE, Ángel Sánchez, sobre el espíritu de los Premios Tiflos de periodismo, que han sido entregados en su XX edición. La convocatoria correspondiente a 2018 acaba de convocarse. Estos galardones reconocen los trabajos que mejor exalten los valores relacionados con la integración de las personas con discapacidad, además de hacer pedagogía sobre la necesidad de suprimir las barreras físicas y mentales que en ocasiones impone la sociedad, más allá del indudable avance legal que se ha producido en la supresión de las barreras arquitectónicas. En estos galardones se valoran especialmente aquellas publicaciones que subrayen el valor de la superación individual o colectiva de todos los obstáculos que frenan el desarrollo personal y social de las personas con alguna discapacidad.  Los Tiflos han conseguido consolidarse en estas veinte ediciones hasta alcanzar un acreditado prestigio en el mundo de la comunicación. Se trata de unos galardones dotados con 9.000 euros para los ganadores de cada una de las categorías: prensa escrita, radio, televisión y periodismo digital. Suele decirse que hay premios que enaltecen al premiado y premiados que otorgan categoría al premio. Del mismo modo hay galardones periodísticos que por su planteamiento honran al periodismo en su enfoque más social y, por tanto, más transformador. El servicio público no es una etiqueta ni un lugar común que se adjunta de oficio al periodismo; es su auténtica esencia en tanto que el periodista y los medios de comunicación gestionan en cierto modo la concesión del derecho constitucional a la información que asiste a todos los ciudadanos. Servicio público, es, por encima de todo, poner el poder de influencia y de generar opinión pública (la fuerza motriz que impulsa buena parte de las decisiones políticas) al servicio de las causas de los más débiles. En este sentido, premios como los Tiflos contribuyen a mantener el alma genuina y la esencia del periodismo como motor de igualdad y progreso social.  En la XX edición de estos galardones el jurado premió distintas publicaciones y reportajes difundidos por El Mundo de Castilla y León, El Español, Radio San Sebastián (Cadena Ser) y Cuatro TV. Entre los trabajos reconocidos figura El sueño de Pere, un reportaje que refleja cómo un niño invidente narra como si de una retransmisión de radio se tratara, el fútbol de su equipo favorito. En radio, resultó ganador el tema Javier y Dover, de Mikel Huarte, que muestra cómo una persona ciega disfruta de un partido de pelota vasca con su perro guía. En el apartado de Prensa Digital resultó galardonado el trabajo titulado Madrid, 25 baños públicos para 3 millones de personas: la ciudad que abandona a los enfermos de colon. El autor, Daniel Ramírez García-Mina relataba en El Español el día a día de dos jóvenes, Amaranta y Miamar, se enfrentan a la dificultad de la escasez de servicios públicos en una urbe como Madrid. Las bases publicadas por la organización establecen que los trabajos que quieran optar a estos reconocimientos en su edición de 2018 deberán haber sido publicados entre el 1 de enero y el 31 de diciembre de este año. Los trabajos podrán presentarse hasta el 25 de enero de 2019. Deberán remitirse por triplicado al consejo general de la la Organización Nacional de Ciegos, concretamente a la dirección de comunicación e imagen, en Calle la Coruña, 18, 28020 de Madrid. En el envío hay que hacer constar, además, la inscripción Premios Tiflos de Periodismo.

Premios Tiflos: la cara social del periodismo

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Un reconocimiento al periodismo “con cabeza y con corazón”, al periodismo “de personas para personas”. Es la síntesis que ofrece el director general de la ONCE, Ángel Sánchez, sobre el espíritu de los Premios Tiflos de periodismo, que han sido entregados en su XX edición. La convocatoria correspondiente a 2018 acaba de convocarse. Estos galardones reconocen los trabajos que mejor exalten los valores relacionados con la integración de las personas con discapacidad, además de hacer pedagogía sobre la necesidad de suprimir las barreras físicas y mentales que en ocasiones impone la sociedad, más allá del indudable avance legal que se ha producido en la supresión de las barreras arquitectónicas. En estos galardones se valoran especialmente aquellas publicaciones que subrayen el valor de la superación individual o colectiva de todos los obstáculos que frenan el desarrollo personal y social de las personas con alguna discapacidad.

Los Tiflos han conseguido consolidarse en estas veinte ediciones hasta alcanzar un acreditado prestigio en el mundo de la comunicación. Se trata de unos galardones dotados con 9.000 euros para los ganadores de cada una de las categorías: prensa escrita, radio, televisión y periodismo digital. Suele decirse que hay premios que enaltecen al premiado y premiados que otorgan categoría al premio. Del mismo modo hay galardones periodísticos que por su planteamiento honran al periodismo en su enfoque más social y, por tanto, más transformador. El servicio público no es una etiqueta ni un lugar común que se adjunta de oficio al periodismo; es su auténtica esencia en tanto que el periodista y los medios de comunicación gestionan en cierto modo la concesión del derecho constitucional a la información que asiste a todos los ciudadanos. Servicio público, es, por encima de todo, poner el poder de influencia y de generar opinión pública (la fuerza motriz que impulsa buena parte de las decisiones políticas) al servicio de las causas de los más débiles. En este sentido, premios como los Tiflos contribuyen a mantener el alma genuina y la esencia del periodismo como motor de igualdad y progreso social.ƒ

En la XX edición de estos galardones el jurado premió distintas publicaciones y reportajes difundidos por El Mundo de Castilla y León, El Español, Radio San Sebastián (Cadena Ser) y Cuatro TV. Entre los trabajos reconocidos figura El sueño de Pere, un reportaje que refleja cómo un niño invidente narra como si de una retransmisión de radio se tratara, el fútbol de su equipo favorito. En radio, resultó ganador el tema Javier y Dover, de Mikel Huarte, que muestra cómo una persona ciega disfruta de un partido de pelota vasca con su perro guía. En el apartado de Prensa Digital resultó galardonado el trabajo titulado Madrid, 25 baños públicos para 3 millones de personas: la ciudad que abandona a los enfermos de colon. El autor, Daniel Ramírez García-Mina relataba en El Español el día a día de dos jóvenes, Amaranta y Miamar, se enfrentan a la dificultad de la escasez de servicios públicos en una urbe como Madrid.

Las bases publicadas por la organización establecen que los trabajos que quieran optar a estos reconocimientos en su edición de 2018 deberán haber sido publicados entre el 1 de enero y el 31 de diciembre de este año. Los trabajos podrán presentarse hasta el 25 de enero de 2019. Deberán remitirse por triplicado al consejo general de la la Organización Nacional de Ciegos, concretamente a la dirección de comunicación e imagen, en Calle la Coruña, 18, 28020 de Madrid. En el envío hay que hacer constar, además, la inscripción Premios Tiflos de Periodismo.

Abril Antara

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Gabinete de prensa, periodismo abierto e influencers

¿Cómo ha cambiado el trabajo de un gabinete de prensa? ¿Los periodistas siguen recurriendo a las informaciones que proceden de estas oficinas? ¿Qué papel cumplen hoy en día? ¿Cómo han incurrido en la relación de un lado y otro de la comunicación los perfiles denominados influencers? ¿Cuál es la misión difusora que cumplen en las nuevas plataformas?

En términos periodísticos, y dentro del ámbito de la comunicación corporativa, o institucional, el gabinete de prensa cumple la misma función que tradicionalmente ha tenido, esto es, difundir informaciones de la actualidad de la empresa, perfil profesional, sector o institución correspondientes con enfoques de valor que proyecten novedad en relación a su actividad, contexto y agenda.

Pero la irrupción de las nuevas plataformas digitales y la relación directa con las audiencias destinatarias de las informaciones han condicionado también el envoltorio de los mensajes a difundir por un gabinete de prensa. Porque, además de los medios tradicionales, los receptores de su producción informativa hoy también son el resto de actores que participan en el concepto de periodismo abierto; desde los protagonistas secundarios de las noticias, los que registran hechos con los dispositivos móviles a modo de periodistas ciudadanos, los que los comparten en las redes sociales desde diferentes puntos de vista, los que dinamizan las noticias que publican los medios tradicionales a través de sus perfiles digitales, los prescriptores que verifican o no el contenido y hasta los influencers, o líderes de opinión con comunidades de seguidores sobre los que influyen en una determinada decisión o información.

Un conglomerado de actores en cuya cúspide se puede ubicar el profesional o la agencia de prensa con capacidad para organizar mensajes, oportunidades informativas, perchas o enfoques segmentados –desde un punto de vista exclusivo-, agendas de contactos influyentes por sectores (la agenda del comunicador de toda la vida pero enriquecida con los de los nuevos protagonistas y audiencias), capacidad de síntesis, expresión dinamizadora, conocimiento del medio, del contexto, de la actualidad –y de ésta con las oportunidades iniciales o con los hitos incluidos en un plan de comunicación-.

Ítems, contactos, plataformas, periodistas, perfiles, influencers,… han de ser protagonistas necesarios del día a día de un gabinete de prensa y de comunicación; de las relaciones públicas y de la repercusión de su trabajo en las sociedades actuales.

Posted by @os_delgado o @360gradospress
Gabinete de prensa

¿Cómo mide un gabinete de prensa la repercusión de su trabajo?

El gabinete de prensa creado o contratado por una empresa incluye, entre sus funciones destacadas, la labor de crear contenidos de calidad periodística en medios propios, difundirlos de manera segmentada entre los potenciales receptores interesados en las informaciones –medios de comunicación offline, online y blogs-, dinamizarlos en los canales adecuados –redes sociales- para alcanzar a la audiencia y, como guinda del proceso, evaluarlos, esto es, medir la repercusión final obtenida.

En la realización óptima de esa misión, la agencia de comunicación dispone de recursos internos (desarrollados ad hoc a partir de las API de las redes sociales o las herramientas de analítica que aparejan; como también de Google Analytics/Search/Trends, rankings web como Alexa y bases de datos optimizadas); y externos, para monitorizar el impacto y el retorno de la inversión del cliente que apuesta por proyectar contenidos de calidad informativa.

Del ámbito externo son numerosos los servicios que tradicionalmente facilitan a las agencias el seguimiento profesional del impacto en medios de comunicación que su estrategia repercute para el cliente (Audit Media, Acceso, Kantar…), así como las startups (Pirendo, Séntisis, Atribus, Launchmetrics, Audiense…) nacidas al albur de la necesidad de medir el impacto potencial de audiencia en las redes sociales, el engagement, el ROI, el sentimiento aparejado a los mensajes que hablan del cliente, el origen de una buena o mala opinión, así como el número de mensajes procedentes de los denominados influencers.

De la capacidad para optimizar los recursos disponibles, la inversión en éstos y la capacidad de la agencia para destinar el tiempo a equilibrar la capacidad de producción informativa de calidad con la de evaluar los progresos, el impacto y el retorno de la inversión del cliente, éste tendrá un input fundamental para saber diferenciar su elección en su apuesta por la comunicación de calidad.

Con todo, el cliente obtiene beneficios directos de todo el proceso cíclico emprendido por el gabinete de comunicación con motivo de la difusión de una campaña puntual o en la relación recurrente con los actores informativos que habrán de hacerse eco de las informaciones que genere: conocer el retorno de la inversión que realiza en comunicación, el valor publicitario estimado de los mensajes difundidos, el conocimiento tiene la audiencia de su firma o la capacidad para curar contenidos gracias a la escucha activa de los principales hitos de su sector y de los acometidos por la competencia.

Foto: Marga Ferrer
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“Un gabinete de prensa ha de procurar que fluya la información”

Detrás de cada contenido de calidad aparecido en medios de comunicación sobre una empresa o entidad organizativa existe un trabajo de comunicación cuidadoso, meticuloso y en el que prima la calidad periodística por encima de la simple información corporativa. Labor de gabinete de prensa que llevan a cabo diversas agencias de comunicación para conectar a ambos entes y que está sirviendo como salida profesional de interés para muchos periodistas.

Juan Tomás Frutos, editor de Informativos en RNE Murcia y profesor asociado en la Universidad de Murcia, ha estudiado el trabajo de estas empresas de servicios periodísticos y valora cuáles son sus puntos fuertes y reseñables.

. También soy , y colaborador de varias universidades iberoamericana

¿Cuáles son las claves principales para el buen funcionamiento del gabinete de prensa de una empresa?

A mi juicio debe haber voluntad de que funcione. Un gabinete de prensa debe estar dotado de contenido, así como de un continente suficiente y adecuado en cuanto a recursos de todo tipo. Asimismo, ha de procurar que fluya la información. Eso supone conocimiento de la entidad que fuere, a la que sirve y emplaza, con sus pros y sus contras, con sus debilidades y fortalezas, y ha de implicar igualmente destreza para que, tras el periódico diagnóstico de la situación comunicativa de la sociedad, se tomen las medidas oportunas, que, por otro lado, serán constantes y en perpetua evolución. La empresa debe creer en el gabinete, y éste demostrar que también se desarrolla por y para ella.

¿Crecen las responsabilidades, las tácticas comunicativas y los ‘vértigos’ a medida que la empresa se hace más grande?

Sí, aumentan las responsabilidades porque la comunicación es un concepto multiplicador y genera más procesos de transmisión de ideas, de conocimientos y de actuaciones ante lo que sucede. No creo tanto en las tácticas como en el trabajo bien intencionado. Transmitir el comportamiento de lealtad es muy útil para ir mejorando, sobre todo porque los errores son inevitables y hay que afrontar cómo subsanarlos raudamente. No olvidemos que, aunque los problemas crecen (es una manera de hablar), también son infinitas las soluciones comunicativas a las que podemos recurrir desde la consideración de las circunstancias de cada empresa y de sus trabajadores. No me gusta la palabra “vértigo” porque éste supone náusea y mareo, y así no es fácil que podamos actuar convenientemente. En definitiva, poco a poco se han de incentivar los flujos comunicativos y la intervención de todos para detectar equívocos o carencias y poder rectificar en tiempo y forma. Además, no olvidemos que nos hemos de preparar para las crisis que, inexorablemente, acontecen.

¿En qué tareas se debe tener más cuidado y aportar más esfuerzo?

En todas las que tengan que ver con la sensibilidad de las personas, tanto de nuestros trabajadores como del público externo objetivo, incluyendo a los profesionales de los medios de comunicación. Hemos de cuidar nuestra imagen corporativa, nuestra visión como marca, y hemos de fomentar y defender valores universales como la bondad, la amistad, el respeto, la solidaridad, el buen hacer, los óptimos objetivos o la cooperación. Hemos de demostrar y demostrarnos que “el fin no justifica los medios”.

¿Qué aporta un periodista al trabajo en un gabinete de prensa?

Su conocimiento de la información, de los procesos de la comunicación y su vocación. Esa “llamada” ha de servir para empatizar, para ser ilusionante, para mejorar las perspectivas y visiones y para razonablemente mostrar resiliencia y asertividad. Ha de constatar que es un experto en comunicación y que le mueve la mejor actitud. Como decía Kapuściński, ha de ejercer como una “buena persona”.

¿Cómo debe ser el trato o el contacto con los medios de comunicación?

Muy afable, lleno de respeto y buscando la credibilidad de todas las partes. El valor más relevante de la información es que sea creíble (es una obviedad). Estamos en una sociedad en crisis que no siempre trabaja esta esfera. La verdad, desde una interpretación plural y democrática, es el sustento de la relación entre los periodistas de los gabinetes y sus colegas de los “mass-media”.

¿Algo más que desee añadir?

Debemos intentar superar las increencias desde la actuación coherente y cohesionada, procurando, en paralelo, la cesión de todas las partes y la contextualización de cuanto efectuamos. Desarrollar, por otro lado, la interacción desde la fe y la confianza. Además, fomentar la voluntad de entendimiento, que siempre ayuda (siempre) a incrementar las relaciones y los contactos comunicativos.

Foto: Marga Ferrer (@marga_ferrrer)

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Técnicas de locución para comunicadores

La voz es el vehículo de la palabra, la principal herramienta para la comunicación y saber utilizarla aporta credibilidad y confianza a nuestro discurso. Siguiendo esta directriz ha arrancado el pasado miércoles (hasta el 19 de febrero) el XII Curso ‘Técnicas de voz y locución para radio y televisión”, organizado por la Asociación de la Prensa de Madrid (APM) y destinado a profesionales de la información.

María Ruiz del Árbol e Isabel Albar, directoras de Eduvoz (@eduvozformacion) y encargadas de impartir el curso, declaran que en él los periodistas, de manera totalmente práctica, aprenden a utilizar la voz correctamente y técnicas de locución de respiración, vocalización, articulación, dicción, entonación y velocidad, encaminadas a leer bien y en su registro todo tipo de textos periodísticos para medios audiovisuales.

Con estos ejercicios se pueden evitar fallos como las respiraciones ruidosas y fuera de tiempo, que no se oigan los finales de las frases, acentuar mal las palabras, el típico “tonillo” de informativo, hacer sinalefas, leer muy rápido o excesivamente lento, o no otorgar credibilidad a la noticia.

Un curso que está viniendo muy bien no solo a periodistas que se enfrentan al trabajo delante de un micrófono, sino también a aquellos que utilizan el teléfono o la conversación cara a cara como herramienta (por ejemplo, quienes trabajan en agencia de comunicación o en gabinete de prensa). “Estas técnicas les pueden servir para mejorar su expresión en público y la comunicación interpersonal con los clientes y con otros colegas de profesión”, aseguran las directoras de Eduvoz.

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“Criticar es fácil; aplaudir parece que cuesta más”

Miguel Ángel Jimeno (@majimeno) ha conocido la prensa en papel y digital desde dentro y ha tenido la oportunidad de contemplar y colaborar en la gestación y evolución editorial de Barcelona’92, diario oficial de los Juegos Olímpicos, Diario de Noticias, Nuestro tiempo, Diari de Tarragona o Heraldo de Aragón, en España, y de otros extranjeros como Clave (República Dominicana), Panorama (Venezuela) o Al Bayán (Dubai).

Este trabajo en las ‘maquinarias’ le ha llevado a valorar cada día más el buen trabajo y los contenidos de calidad que se hacen en agencias de prensa, medios de comunicación y gabinetes de prensa, gracias a periodistas y editores comprometidos como profesionales. Así, y a partir de su propio blog, desde hace cinco años convoca los Premios La Buena Prensa para galardonar a quienes luchan por mantener vivas las palabras de Gabriel García Márquez y seguir catalogando este oficio como el mejor del mundo.

¿De qué manera entiende el buen periodismo?

El buen periodismo se nota. Es aquel que dedica un poquito más de tiempo a un tema, es el que planifica cómo abordar un hecho, el que aporta varias fuentes, el que se para a pensar en el modo más eficaz de contar las cosas, el que mima la escritura, el que va más allá del dato y lo liga a una historia, el que se preocupa por contextualizar, el que apuesta por una información, pero también por su previa y su día después, el que intenta que tema y diseño vayan de la mano, el que mima el título y el primer nivel de lectura, el que edita las imágenes, etc.

Parafraseando el nombre del certamen que organiza, ¿se hace hoy por hoy ‘buena prensa’ en España?

Claro que se hace buena prensa en España. De hecho, en mi blog muestro ejemplos a diario. Cada día encuentro buenas informaciones, análisis, previas, coberturas de hechos previstos, seguimientos, historias, etc.

¿Destaca algún medio?

Puedo destacar muchos. Hay excelentes regionales como El Correo, La Voz de Galicia o El Diario Vasco. Todos los días hay excelentes páginas en La Vanguardia y El Periódico, los grandes catalanes. Hay otros regionales de menor tirada que vale la pena seguir como Las Provincias, Diario de Burgos, Diario de Navarra o Ideal de Granada. Entre los medios nacionales, me gusta mucho la edición online de El País y cada día encuentro muy buenas informaciones en El Mundo, que además es una maravilla desde el punto de vista visual.

¿Y si comparamos este panorama con el latinoamericano?

En Latinoamérica, en general, los medios son distintos. Hay algunos muy grandes y muchos muy pequeños. La “clase media”, mayoritaria en España, allá apenas existe. Entre los diarios grandes, hay algunos muy buenos. Si tengo que citar alguno, me quedo con los brasileños, con algunos colombianos (El Tiempo, El Espectador o El Colombiano), con el argentino La Nación, con el chileno La Tercera, con el peruano El Comercio y con el mexicano El Universal.

¿Cuáles son los objetivos que se plantea con los Premios La Buena Prensa?

Los premios nacieron como un medio de “complementar” el espíritu del blog. Como hay muchos periodistas que siguen cada día el buen periodismo que muestra este, qué mejor que crear premios para aplaudir el buen periodismo. El objetivo era humilde. Pero desde la primera edición la respuesta fue abrumadora. En el sentido de que excelentes periodistas se presentan. Creo que tiene mérito que se presenten tantos colegas, porque lo que reciben, si ganan, es un diploma. No hay dinero de por medio. Como promotor, me gusta que, para muchos periodistas, sea un honor ganar uno de los premios.

¿Mantiene las mismas categorías cada año?

Desde la primera edición las categorías son las mismas: mejor reportaje, crónica, entrevista, análisis, serie y cobertura de hecho previsto e imprevisto. El año pasado nació un nuevo premio, el José Antonio Vidal-Quadras, en honor a un periodista y profesor de la Facultad de Comunicación de la Universidad de Navarra, en la que trabajo. Este premio lo gana el periodista “más completo”, el que, en función de los trabajos que presente, el jurado vea que es un “todoterreno”. Y este año ha nacido otra categoría, el Francisco Sancho, también en honor de este periodista y profesor de FCOM, fallecido el pasado noviembre. Como Paco era un gran formador de periodistas, el premio se lo llevará el periodista menor de 25 años con mejores trabajos.

¿Desea resaltar alguna cosa que se haya quedado en el tintero?

Es importante destacar y aplaudir el trabajo de cientos de periodistas españoles y latinoamericanos que cada día intentan hacer bien su trabajo y más aún en estos tiempos de incertidumbres, dudas, inquietudes y sufrimientos que viven las redacciones. Criticar es fácil. Aplaudir parece que cuesta más. Como colega y lector, solo pretendo dar las gracias a los periodistas.

Desenlace liguero, arte, tradiciones y periodismo

logo dearteEl mes de abril coincidente con año de Mundial de fútbol siempre apareja una agenda fuertes emociones para los amantes del deporte rey. Las coberturas informativas de la agencia apuntarán hacia el desenlace del campeonato de Liga BBVA y la final de la Copa del Rey, que coincidirá también con tiempo de tradiciones, viajes, procesiones y romerías propias de Semana Santa.

Asimismo, la atención sobre los actos relacionados con las nuevas plataformas a disposición de los periodistas volverá a ser prioridad Las II Jornadas de Periodismo de Datos y Open Data, que acogen Madrid y Barcelona entre el 24 y el 27 de abril, así como el V Encuentro Periodistas versus Gabinetes, que se celebra en la UCM el 29 de abril, acapararán la atención de Soma Comunicación.

Por último, el arte cobra protagonismo este mes con la inauguración en Madrid, Soria y Medinaceli de la XIII Feria DeArte. Una cita en la que la agencia pondrá el foco, como también en la nueva etapa creativa del artista madrileño Jorge Morgan.

Tanto en las jornadas futbolísticas como en los actos de las fechas festivas más señaladas del calendario, Soma Comunicación ofrece un dispositivo especial bajo demanda para dar cobertura informativa a los hitos que quiera el cliente (medio de comunicación, empresa o institución).

Claves para la eficacia de las oficinas de prensa

Pelaez 222¿Qué habilidades técnicas han de tener las agencias que ofrecen de forma externa servicios periodísticos a empresas? ¿Cuáles son las necesidades habituales que han de cubrir para satisfacer las expectativas de dichas entidades?

Hay muchas preguntas sin respuesta en el ámbito de los servicios periodísticos que muchas empresas externalizan de manera recurrente o puntual, ya sea por la celebración de un evento o de una convocatoria extraordinaria. Si salvamos el refranero y el ‘cada maestrillo tiene su librillo’ y nos centramos en las claves que han de tener en cuenta quienes se plantean externalizar su oficina de prensa o quienes pretenden ofrecer dichos servicios, es importante tener en consideración las siguientes claves, todas ellas auspiciadas necesariamente por el valor añadido de la calidad:

Aceptación. No siempre hay que decir sí a una campaña. La honestidad ha de guiar en ocasiones a indicar a la empresa que determinado planteamiento que quiera comunicar no es sintonizable con las expectativas de repercusión que haya previsto. Es aquí cuando la agencia que los puede ofrecer ha de proyectar sensatez a través de planteamientos alternativos, elección de fechas más apropiadas o de conceptos distintos.

Planificación. El refranero apunta a un ‘la mejor improvisación es la que se prepara’ (y se planifica). Es importante contar con el margen de maniobra suficiente para planificar la acción con la empresa para que cuando llegue el momento de poner en práctica el dispositivo de prensa externo no haya que dudar, sólo ejecutar.

Contenido. El enfoque, el contexto, las fuentes, la oportunidad, la idoneidad, la novedad, el dato… cuanta más presencia tengan en el contenido a difundir, más entidad cobrarán, tanto para el receptor (y potencial difusor) como para el protagonista.

Contactos. Independientemente de las plataformas que se escojan para desarrollar la acción, un periodista sigue pesando lo que pesa su agenda de contactos, tanto de los preexistentes offline como de los que se haya forjado online. Éste es uno de los aspectos clave que tendría que valorar la empresa que se plantea contratar los servicios de oficina de prensa o de gabinete de comunicación. Asimismo, es lo que diferencia a las agencias buenas de las agencias no tan buenas.

Contacto. Mantener una comunicación interna fluida con la empresa que contrata los servicios, buscar un interlocutor adecuado en el seno de la misma e informar puntualmente de los avances en relación a lo planificado a priori, también enriquecen el resultado final del servicio ofrecido por la oficina de prensa externa.

Servicio. Como en otros ámbitos profesionales, la vocación de servicio también ha de ir aparejada al desarrollo de los trabajos de comunicación externa. Es la atención al cliente eficaz, directa, inmediata. Un trabajo bien hecho ha de ir acompañado por la virtud de la transparencia, de la resolución de dudas o de la demostración de los avances acometidos.

Especialización. Los contextos actuales requieren especialización de contactos y de fuentes, virtudes que alimentarán el mejor desarrollo de la campaña de comunicación externa y que evitarán generar ruido gratuito entre los colegas de medios y de blogs que no sean destinatarios potenciales de las informaciones difundidas.

Medición. La rúbrica siempre ha de llegar con el balance puntual del trabajo desarrollado por la oficina de prensa externa. Medir el impacto entre el público potencial al que se dirige la campaña, la respuesta de los medios de comunicación o de los perfiles influyentes del sector en las redes sociales son aspectos irrenunciables para quien ofrece el servicio y fundamental para quien lo contrata. Porque, ¿de qué sirve trabajar bien si después no puedes demostrar que ha sido así de facto con datos en la mano?

Cuestión de actitud

Captura de pantalla 2013-07-01 a la(s) 18.08.55Ahora que los exámenes de Selectividad han terminado y que muchos posibles estudiantes de Periodismo dudan entre escribir o no “Grado en Periodismo” en las hojas de matrícula de las universidades, me siento en la obligación de animarles a hacerlo, si es que de verdad les gusta esto de contarle a la gente lo que le pasa a la gente. A pesar de todo.

Entrar a la facultad de Periodismo y a las pocas clases escuchar que la carrera no tiene mucha salida es de lo más habitual. Oír a los propios profesores desalentar a los estudiantes, algo común. Comentar entre los compañeros lo acertado o no de haber elegido esta carrera en vez de cualquier otra, también algo recurrente.

¿Realismo o pesimismo? -me preguntaba yo-. Con el tiempo, los vaticinios de los profesores y las dudas de los colegas, efectivamente, han cristalizado en una realidad bastante incierta y sin perspectivas de recuperación… pero, ¡sólo nos faltaba a los estudiantes y a los recién graduados sumirnos en ese pesimismo!

El periodismo es una profesión que cada vez va a tener un papel más relevante en el mundo online. La sobreabundancia de información que circula por internet situará inevitablemente al periodista como sello de garantía de, al menos, la veracidad de sus publicaciones. Pero para consolidarse en esa posición de referencia primero tiene que hacerse valorar. Y eso empieza por abandonar un periodismo cada vez más precario, con menos recursos y, consecuentemente, sin valor añadido y sin personalidad distintiva.

Por suerte no son pocos los medios y los periodistas que se empeñan en combatir esta deriva y apostar por un producto de calidad. A estos medios y a estos periodistas es a los que los estudiantes deben tomar como ejemplo.

También por suerte, todavía existen profesores que sí insuflan dosis de optimismo a los alumnos: profesores/profesionales del sector que de verdad sienten pasión por la comunicación y que tienen vivo el gusanillo del periodismo. Y es que a la postre, se trata de una cuestión de actitud.

Yo no tengo ni la más mínima duda: si volviese atrás en el tiempo y tuviese la oportunidad de elegir de nuevo qué carrera estudiar, cogería el bolígrafo y escribiría: “Periodismo”, ¡y lo anotaría con una sonrisa en la boca! Al mal tiempo, buena letra.

Posted by @PauFIR

Tics del periodismo tradicional en gabinetes institucionales

Gabinete de prensa Soma Comunicación“Queremos hacer una entrevista a…”. En ese momento, el periodista que se encuentra al otro lado del teléfono deja de escuchar a su colega y, como un teleoperador de compañía telefónica con la chuleta de respuestas a preguntas frecuentes en la mano, responde: “Mándame la petición por correo electrónico –hasta hace unos días incluso por fax-, la descripción del medio de comunicación, la radiografía de la primera comunión del compañero que la va a hacer y las preguntas que le quiere plantear a nuestro ilustrísimo y honorable protagonista. Muchas gracias y estamos en contacto”.

Con el grado de hipérbole, sorna e ironía necesarios para asimilar sin ponernos demasiado serios este modus operandi heredado del pleistoceno periodístico, del ansia de control institucional por todo lo que se publica, de la ignorancia de ese flanco tradicional de la profesión en relación a la apertura de enfoques, fuentes y recursos cualificados que se obtienen a través del ámbito digital, planteamos una rutina que, muy a pesar de los que desde esos ámbitos gritan por la supervivencia del periodismo en formato de comunicado institucional que reza sobre lo que es políticamente correcto para los profesionales de la comunicación,  es habitual encontrar todavía cuando un periodista solicita una entrevista a otro periodista.

A veces se escucha el sonido del eco del búnker o el del rodillo oficial con el que todo lo quieren impregnar los gabinetes institucionales, incluso con su desembarco como elefantes en cacharrería en la fluidez e inmediatez informativas de los canales sociales. Cuando realmente se olvidan de que el cambio de mentalidad tradicional que ha salpicado los medios tradicionales también ha de comenzar a implementarse en su funcionamiento ordinario. No es tanto estar también con el mismo tic ahora en estas plataformas, sino cambiar la mentalidad y adaptarla, por el bien de sus representados e instituciones, a la frescura de los nuevos tiempos.

De lo contrario, comunicarán formatos de relación con los medios de comunicación ajenos a las rutinas que abren las nuevas plataformas periodísticas, las nuevas fuentes, los nuevos enfoques, las nuevas realidades alejadas de los tambores oficiales y con mayor carga informativa y con más calidad que la que pueden seguir ofreciendo desde ese comportamiento retrógado los gabinetes institucionales mal adaptados a la segunda década del siglo XXI.

Foto: Instagram 360gradospress