El siguiente tuit compartido por Elvira García de Torres (@gdetorres), profesora de periodismo digital, inspira el desarrollo del presente post, como reflexión de hacia dónde discurre el reciclaje profesional del periodista en relación a las nuevas plataformas (la palabra ‘nuevas’ ya comienza a estar entrecomillada porque el tiempo pasa) donde ejercer sus habilidades informativas y comunicativas.
Pues eso, que ahora ya no es suficiente con un curso de CM para reciclarse: hay que pasar a marketing digital #periodismo
— ElviraGarciadeTorres (@gdetorres) octubre 13, 2015
De un tiempo a esta parte, afloró una oferta formativa de másteres de Community Management, cuyas plazas fueron copadas principalmente por periodistas que, tras un periodo de incertidumbre, cierre de cabeceras, desempleo disparado y con más de 9.000 periodistas en paro desde el inicio oficial de la crisis (2008) hasta 2014, despertaron el interés plumilla ante la necesidad imperiosa de reciclarse.
Otros, optaron por caminos más cortos, principalmente los más madrugadores en despertar del letargo tradicional, aquellos que, por obligación o por curiosidad aprendieron el funcionamiento de las nuevas plataformas de forma autodidacta. Porque, justo coincidiendo con el inicio de la crisis, las nuevas herramientas ya existían (blogs, Twitter, Facebook…), pero no una oferta formativa al uso para conocerlas más allá del voluntarismo de la experiencia propia sobre el terreno.
En paralelo, 3.000 nuevos periodistas salían (y salen) cada año de las facultades de Periodismo españolas con unos conocimientos aprehendidos sobre lo que tradicionalmente han sido las normas de redacción salpimentadas por especializaciones de contacto con materias sociales y científicas aunque poco conectados con esa necesidad de domesticar las “nuevas” herramientas para ejercer las habilidades comunicativas con garantías en los soportes digitales, con la aspiración de que el emisor conecte sus mensajes informativos con un receptor interesado en dichos contenidos.
Es en este punto donde recuperamos el tuit inicial para lanzar a las comunidades periodística, universitaria y emprendedora la siguiente pregunta: ¿no será necesario implementar nociones de marketing digital en cualquiera de los tres niveles contemplados (desempleo, emprendimiento y universidad) en la descripción evolutiva de cómo el periodista se acerca o se ha acercado a las herramientas digitales? Conociendo mejor las audiencias, los soportes, los canales, las plataformas y los destinatarios potenciales de cada tipo de información –especializada, para ámbitos comunicativos o procedentes de gabinetes de prensa; informativa, para fines puramente informativos en los nuevos medios o en los tradicionales reconvertidos a aspectos digitales-, quizás sea un camino necesario para consolidar la transición del periodista a los nuevos soportes y, con ello, combatir otras herencias, como el intrusismo o las voces discordantes hacia las propias plataformas digitales.