El turismo está en constante revisión. Limitarse a los encantos propios de un territorio como forma de atraer a visitantes hace ya muchos años que empezó a quedarse corto. Contar con el mejor clima, hermosas playas, una rica vida rural o la mejor gastronomía vale de poco sin una promoción que ensalce todas sus bondades y ponga la miel en los labios a los potenciales turistas. Como parte de esa reinvención ininterrumpida, el Ayuntamiento de Alicante ha hecho pública su nueva imagen turística, con un diseño y un lema que trata de resumir en dos palabras lo mejor que ofrece: ‘City & Beach‘.
Nuria Clemente, una valenciana de apenas 23 años y estudiante de un máster de Creación Digital, ha sido la encargada (concurso mediante) de aglutinar en un solo diseño todo lo necesario para atraer a los visitantes. Una tipografía sencilla, en dos colores de tonos azulados, corona ahora el portal web de Alicante Turismo, en el que el consistorio muestra todos los atractivos turísticos de la capital de la Costa Blanca.
También el perfil oficial de Twitter de la plataforma turística municipal luce ya la renovada imagen en su foto de perfil, y se ha aprovechado la apertura de puertas de Fitur, Feria Internacional del Turismo que está ahora mismo celebrándose en Madrid, para presentarlo en sociedad ante los profesionales del sector. Como destino de sol, playa y gastronomía, Alicante compite contra otras muchas ciudades, tanto extranjeras como nacionales, por la notoriedad y la atención de los asistentes a la feria y de los potenciales turistas en sus lugares de origen. Contar con las herramientas adecuadas, como una buena imagen de marca, es fundamental para hacerse notar.
Con esta elegante y versátil nueva imagen (la ‘l’ y la ‘i’ de Alicante forman dos edificios, y en la parte inferior del logo hay una especie de ola que emula el Mediterráneo), que en un solo concepto plasma la idea que el consistorio sobre aquello que como ciudad puede ofrecer a quienes quieran realizar un viaje, Alicante refuerza su apuesta por un modelo productivo mixto. A medio camino entre el nutrido tejido industrial de la provincia y el sector servicios que potencia el turismo, la ciudad apuesta por un lavado de cara para apuntalar la faceta visible de su oferta cultural, gastronómica, urbana y de ocio.