veronica-calderon

“Basta con revisar las firmas de los diarios de México para comprobar la ausencia de mujeres”

Verónica Calderón asegura en su blog que cuando dirija un periódico prohibirá “para siempre el uso de la primera persona en un texto”. Pero lo cierto es que todavía se ve complicado que una mujer alcance el mando de los principales diarios mexicanos, debido al imperante machismo que, ella misma admite, se sigue viviendo en las redacciones. Por no hablar del peligro (de muerte) que los periodistas viven cada día en las calles. A pesar de ello, Calderón se esfuerza cada día por proporcionar al lector información de calidad y en tono social, que se aleje de la censura gubernamental dominante.

¿Te informas a través de la prensa en papel, digital, radio o televisión?

Intento escuchar un informativo de radio al día y leo los periódicos en digital (desgraciadamente, cada vez menos en papel). Consumo muy poca televisión, salvo los 24 horas de EEUU cuando hay un última hora.

¿Qué aprendiste a nivel profesional de tu paso por El País en tu estancia en Madrid?

Fue una experiencia que me cambió para siempre y de la que estoy profundamente orgullosa. Tuve la fortuna de estar en la calle Miguel Yuste en una época difícil, pero rodeada de profesionales que hacían un gran periódico. Aprendí mucho de ellos no solo de periodismo, sino de la vida en sí, y me siento muy contenta de haberlo compartido así en ese momento.

¿Cuál es el panorama actual del periodismo en México?

Desolador. Nuestra frágil democracia no ha conseguido consolidar la información como un derecho básico para el ciudadano y muchas prácticas que eran comunes durante los 71 años que el PRI gobernó a este país sin alternancia se mantienen. Hablamos de los medios que solo subsisten a través de la información oficial, el soborno a periodistas, la autocensura y el autoritarismo. A esto se suma la violencia del narcotráfico que ha crecido precisamente desde que el PRI perdió la presidencia de México, en 2000, y que ha provocado una sangría entre los informadores. El periodista en México se enfrenta a sueldos bajísimos, a jefes que en muchas ocasiones no darán la cara por él, a una sociedad que mira con mucho recelo su trabajo y finalmente a la impunidad en caso de sufrir una amenaza o un atentado. “Te van a matar”, es algo que les dicen a los jóvenes en las facultades de Periodismo en México. Ya se toma como natural que nuestro trabajo sea una garantía de amenazas y eso es tan asumido que la gente te pregunta por qué insistes en ser periodista, si las cosas “son así”. Es muy triste.

¿Es peligroso ser un periodista comprometido con la sociedad y no con el gobierno en México?

Por supuesto. La mayoría de las agresiones en México contra periodistas vienen de funcionarios públicos, según reconocen sus propios datos. El Gobierno es el último interesado en que nuestro trabajo sea respetado. El presidente Peña no ha dado una rueda de prensa en al menos un año (si no es que más tiempo). Los ministros igual. No hay una cultura de información y no hay interés en promoverla.

¿Cuáles son las claves para dedicarse al periodismo social, para ‘contar a la gente lo que le pasa a la gente’, de forma honesta y de calidad?

Ser valiente, ser honesto y aceptar cuando uno se equivoca (que es muchas veces). Una vez que se establece un vínculo de confianza entre el periodista y el lector, es muy difícil que se rompa.

¿Cómo crees que se están adaptando los medios tradicionales al trabajo en digital en tu país? ¿Hay resistencias a cambiar de rutinas y hábitos anteriores?

Totalmente. Diría incluso que no están acostumbrados a que ahora tienen una audiencia que responde. No solo los medios, el propio gobierno. Dato: los únicos dos funcionarios de Peña Nieto que han dimitido lo han hecho porque usuarios de redes sociales les han sorprendido y el escándalo se ha hecho público. Eso habla de lo poco acostumbrados que están.

¿Cuál es la situación actual de la mujer periodista en tu país? ¿Es fácil o complicado encontrar directoras de medios de comunicación allí?

Es muy complicado. Incluso a bote pronto solo recuerdo un ejemplo. Hay un machismo imperante en todo el país y el periodismo no es la excepción. Una mujer que cubre temas de seguridad es raro y mal visto. Basta con revisar las firmas de los principales diarios y de algunas oficinas de medios extranjeros en México para comprobar la ausencia de mujeres en este sentido.

Además de prohibir el uso de la primera persona en un texto, ¿cuáles serían las características que imperarían en el periódico que dirigieses?

Digamos que lo de la primera persona venía a cuento porque me parece que hay una exageración en el papel de “El Periodista” y, salvo cuando realmente somos testigos de cosas totalmente excepcionales, generalmente sobrevaloramos nuestro papel. “Como este periodista les adelantó”, “en ese momento pensé”. ¿A quién rayos le importa? Honestamente solo pediría mucha más humildad y que aprendamos también a reconocer nuestros muchísimos errores. La arrogancia en mi oficio es muy responsable de la crisis por la que estamos pasando, no sólo en México sino en todo el mundo.

Escrito por @casas_castro
Dronestagram, la primera red social para drones

Dronestagram, la primera red social para drones

De los canales sociales de fotografía por excelencia Instagram, Snapchat y Flickr, llega la versión adaptada para imágenes captadas con drones, que ya funciona en Estados Unidos, Francia, Canadá, Reino Unido, Alemania y España y que posee más de 35.000 usuarios registrados. Permite explorar paisajes recónditos, nuevos, inéditos, así como compartir impresiones y realizar comentarios, al igual que cualquier otra red social.

El funcionamiento es el mismo que en Instagram, aunque no cuenta con filtros y el único requisito es subir vídeos o fotografías que hayan sido captados por un dron. Con ello, según informa la compañía en un comunicado, se pretende realizar un mapa de la tierra “a vista de pájaro” con la colaboración de todos los usuarios.

Al igual que sucede en Flickr, en Dronestagram las imágenes están organizadas por temáticas, lo que agiliza la búsqueda del usuario, tanto a la hora de subir material a la plataforma como para buscarlo. Por lo que es importante cuando se sube a la plataforma una imagen categorizarla, según lo que le corresponda, como “urbana”, “campo”, “ciudad”, “industrial” o “deportes”. Del mismo modo, las fotografías tienen una referencia geográfica, que se puede apreciar a través del mapa de la página web donde figura la localización y la zona desde donde han sido tomadas distintas imágenes.

Dicha información revela también el autor, el modelo del dron utilizado para captar estas imágenes y otras fotografías realizadas en el mismo terreno. Actualmente la plataforma solamente está disponible en inglés, pero ofrece muchas ventajas en el campo audiovisual como sucede con los vídeos en 360 grados, porque permite una visión global de un enclave paisajístico. Probablemente, se convierta pronto en otra de las herramientas móviles que terminarán empleando los profesionales audiovisuales o periodistas para enriquecer sus informaciones con gráficos de mayor calidad y aportar una visión globalizada de un tema en concreto.

En el caso de los vídeos, el funcionamiento no es igual, pues para subirlos a la plataforma social primero deben estar en Vimeo o Youtube. Una vez indexados en dichos canales, ya se puede compartir con la sociedad una perspectiva diferente del mundo que te permite hallar imágenes espectaculares como, por ejemplo, las del Cristo Redentor en Brasil o vídeos de las Islas Maldivas.

Concurso Internacional de Fotografía de Drone 2017

Dronestagram acaba de publicar la cuarta edición del concurso anual de fotografía área, que nuevamente es respaldado por National Geographic. Los pilotos y creadores de contenido pueden mandar su mejor trabajo hasta el 30 de junio. El concurso de este año se compone de tres categorías: Naturaleza, Urbano y Gente.

Fotografía: Colors of the river
By
SEO y marketing de contenidos

SEO y marketing de contenidos, el tándem perfecto

Posicionar una página web en el ‘top ten’ de Google incluye varios pilares, entre los que encuentra elaborar y ejecutar una estrategia SEO para marketing de contenidos. Se trata de una de las formas más idóneas para atraer tráfico que llega desde el blog, la propia web y las redes sociales a través de texto, imágenes, vídeos o infografías.

El marketing de contenidos resulta una parte imprescindible para el SEO, de hecho, uno no puede vivir sin el otro, y gusta tanto a los motores de búsqueda como al propio usuario. Por ello, y para trabajarlo de forma correcta, os damos las siguientes pautas:

  • Calidad en la escritura. Hace un tiempo la gente escribía para los buscadores, es decir, de forma robotizada con un montón de palabras claves, sin apenas nexos, frases muy cortas, etc. A día de hoy Google premia principalmente la calidad, con un texto bien articulado y original. Efectivamente, debe integrar las keywords que se quieran posicionar, pero debe ser un post que interese al público objetivo, comprensible y que sea interesante para que se pueda compartir. Además, de esta manera se logra que la tasa de rebote no sea elevada y la gente permanezca más tiempo en la página web leyendo un contenido único e interesante.

  • Longitud del texto. Se dice que con 300 palabras es suficiente, pero los motores de búsqueda indexan mejor post que lleguen a las 600 palabras. Realmente no es tanto como parece, una hoja aproximadamente.

  • Introducir imágenes. Tanto lo vídeos como las fotografías se han convertido en elementos imprescindibles para posicionar el contenido. De hecho, las imágenes se pueden etiquetar y lograr que aparezcan en los primeros puestos de “Google Images”. Asimismo, los audiovisuales hacen que el contenido sea mucho más atractivo, generando así más engagement con la audiencia.

  • evergreen. Se trata de aquel contenido que no caduca, que sigue interesando durante mucho tiempo. Por ello, sigue atrayendo tráfico, construyendo un buen link building en torno a la web y difundiéndose en redes sociales. Por eso, es conveniente ir combinando temas de actualidad con aquellos más atemporales que contienen una información muy elaborada e interesante.

  • Compartir en redes sociales. Twitter, Instagram o Facebook indexan desde hace tiempo en Google. El buscador se dio cuenta de que los contenidos con mayor feedback en redes sociales debían de ser considerados prioritarios en el posicionamiento. Por eso, dentro de la estrategia SEO no se puede olvidar compartir la información que se trabaja para el blog. Los propios usuarios, a su vez, pueden compartir lo que se haya publicado incrementado así el tráfico a la web.

  • Por muy bueno que sea un post, sino se publica con cierta frecuencia en el blog, este caerá en desuso y, por ende, posiciones en Google. Los motores de búsqueda premian a aquellas páginas que suben contenido más a menudo, pues se trata de una web cuidada y con vida. Lo ideal es que una vez a la semana se suba contenido y, si es un día fijo, mucho mejor para que la audiencia que esté interesada lo tenga marcado.

  • Enlaces y negritas. Este asunto ha sido uno de los más importantes a la hora de subir un post. Pero los buscadores ya no premian tanto esta actividad como antes. Se pueden poner algunas negritas en palabras clave, sin abusar, sobre todo para ayudar en la lectura y, como mucho, un par de enlaces externos (siempre a páginas de autoridad) y uno interno.

Por tanto, trabajar concienzudamente y ejecutar una buena estrategia SEO de marketing de contenidos resulta fundamental para que la página web se sitúe en las primeras posiciones. Además, un contenido de calidad ayuda en la reputación de la marca, ya que se convierte en un referente en el sector que se encuentre.

rodrigo-terrasa

“La prensa deportiva especializada ha perdido la cabeza”

El periodista Rodrigo Terrasa lleva ligado al diario El Mundo desde hace 16 años, donde ha escrito sobre deporte y política, y coordina la edición digital de la Comunidad Valenciana desde 2008. Su pasión por el baloncesto le condujo en sus inicios a escribir en el diario deportivo valenciano Superdeporte y, posteriormente, en la cabecera en la que sigue trabajando. Duro crítico de la gestión política del PPCV, confiesa que en los últimos años, con la llegada al poder del tripartito PSPV-Compromís-València en Comú, “se agradece leer por fin que los políticos se pelean y debaten sobre cuestiones realmente políticas, de gestión”.

¿Qué te movió a decidir dedicarte al mundo del periodismo y a continuar hoy en día en él?

Supongo que decidí hacer periodismo porque me gustaba escribir, pero no era suficientemente bueno como para ser novelista. Y me gustaba el deporte, pero no era suficientemente alto como para jugar en la NBA. Así empecé a escribir de baloncesto hace unos 18 años y entonces me parecía que no podía ser más afortunado. Iba al baloncesto y lo contaba después y encima no es que fuera gratis, es que me pagaban. Ahora escribo de política y lo hago casi con la misma ilusión. Me interesa lo que veo y me gusta contarlo.

¿Cómo defines una buena práctica periodística?

Soy incapaz de definir qué es o no buen periodismo, pero sí sé que cada vez es más difícil encontrar del bueno. Soy muy pesimista con la deriva actual que lleva el negocio. Creo que, lejos de entender los beneficios de internet, el periodismo se está prostituyendo de forma descarada para conseguir tráfico en la red a toda costa y hace mucho que hemos confundido el negocio. Montamos una verdulería, pero ofrecemos bigmacs, porque se consumen más. Algo así está pasando en la prensa. Se supone que estamos para informar con rigor y calidad, pero ofrecemos basura a capazos porque nos da más tráfico. En el juego de ‘casi todo vale para conseguir clics’ han entrado hasta las grandes cabeceras y eso es un drama porque nos hemos cargado el rigor y la credibilidad de un golpe. No sé cuál es la solución pero estamos muy lejos de ella. Yo, a nivel individual, trato de ser honesto con mi trabajo, escribir lo mejor posible sobre temas que me gustaría leer, no engañar a nadie e intentar conseguir que cualquier lector entienda lo que estoy escribiendo.

¿Crees que tiene más calidad o valor como profesional el periodista que hace años se dedicaba ‘solo’ a investigar y a escribir sus noticias o el actual multitarea, que ocupa todas las funciones desde la redacción hasta la publicación pasando por la grabación y la edición, en el caso del audiovisual?

Si algo bueno nos ha traído la crisis del sector es que nos ha obligado a aprender de todo para sobrevivir. Yo, en Valencia, con recursos mínimos, escribía mis reportajes, grababa y editaba mis vídeos y, a veces, hasta hacía la foto. Desde luego no es el escenario ideal, pero aprendí muchísimo. Creo que hoy en día siguen siendo imprescindibles las dos tareas. Un gran periódico necesita periodistas con fuentes, capaces de obtener exclusivas y grandes temas, y periodistas multitarea, capaces de contarte una historia en vídeos, en redes o combinándolo todo. Despreciar cualquiera de las dos opciones me parece una mala solución. El periodismo multimedia no es incompatible con el periodismo de investigación. Al contrario. La solución seguramente es aprender a combinar ambas cosas. Contar con periodistas capaces de traer grandes historias y poder ofrecerlas al lector con todas las opciones que nos brindan hoy las nuevas tecnologías.

¿Qué debe contener una entrevista para que aporte información de interés al mismo tiempo que enganche al lector?

Sobre todo, respuestas. Si no consigues que el entrevistado te cuente algo, estás jodido. Y creo que, además, la entrevista debe tener contexto. Si el lector no entiende por qué es importante esa entrevista y por qué es relevante ahora, mal asunto.

¿Qué nuevas narrativas exige hoy la información política? ¿Cómo las desarrollas en El Mundo?

Creo que atravesamos una época maravillosa para hacer información política y la gente la quiere consumir. La gente necesita entender qué está pasando, sobre todo, a raíz de la crisis económica y del 15M. Es una de las claves, por ejemplo, del éxito de Salvados. Yo creo que la obligación de los periodistas es escribir (o hacer televisión o radio) para esa gente que necesita entender. Durante mucho tiempo, la prensa política ha pecado de escribir sólo para las élites, para influir en las altas esferas políticas, para que le lean ministros y secretarios de estado, y se ha olvidado de los lectores de la calle. Nos ha pasado un poco a los medios como a los partidos políticos tradicionales, que nos hemos olvidado para quién trabajamos. Yo me incorporé en 2015 a la redacción central de El Mundo, en Madrid, con el cometido de generar contenidos de política que pudieran funcionar, sobre todo, en internet, que los leyera la gente joven, que hasta fueran virales sin necesidad de incluir gatos, sexo o memes. Que se leyeran, en definitiva. Se trata al final de escribir sin asumir que el lector conoce como tú el escenario, de titular con habilidad para ser atractivo no sólo para el lector habitual de información política y de aprovechar todas las herramientas que puedan ayudarte a hacer llegar ese contenido: vídeos, redes sociales, infografías, datos. Creo que entre la información política triste y aburrida y los álbumes de los diputados más guapos del Congreso hay un término medio que se puede explotar.

¿Cómo ves el panorama político valenciano y su tratamiento en los medios de la ciudad?

En Valencia se agradece leer por fin que los políticos se pelean y debaten sobre cuestiones realmente políticas, de gestión. Ahora desde la distancia veo que las polémicas en Valencia son cuestiones como el carril bici o el debate sobre la educación concertada, el modelo lingüístico o el de sanidad pública en la Comunidad. Ya era hora de que se hablara de estas cuestiones en la Comunidad Valenciana y no de quién era el último cargo imputado, el último sumario o el nuevo caso de corrupción. Por otro lado, creo que lo que ha ocurrido en la ciudad durante las últimas décadas obliga a los medios valencianos a una profunda autocrítica. Es cierto que en los últimos años ha habido un trabajo periodístico brutal para destapar numerosísimos casos de corrupción, con especial mención al trabajo de mis compañeros de El Mundo en la Comunidad Valenciana en unas condiciones durísimas, pero también es verdad que hemos llegado todos demasiado tarde y que se han cometido todo tipo de tropelías por parte del Partido Popular con el silencio cómplice de toda la prensa durante demasiado tiempo. Deberíamos hacérnoslo mirar para que no se repita.

¿Es más fácil o más complicado acceder a las figuras políticas valencianas hoy en día o hace diez años?

Yo hace 10 años no hacía información política, pero no tengo la menor duda de que es mucho más sencillo acceder hoy en día a cualquier político, sea del partido que sea, que hace una década. Hoy es mucho más difícil esconderse, mucho más complicado no dar ruedas de prensa o no atender a los medios. La crisis ha traído también un nivel de exigencia a la clase política de la que los medios nos hemos beneficiado. Hoy es muchísimo más complicado tapar un escándalo político porque si la prensa no lo cuenta, ya lo contará alguien en Twitter o en Facebook. O saldrá en un blog o en cualquier otro sitio.

¿Cómo ha evolucionado el periodismo deportivo en España, y en Valencia en concreto, en las dos últimas décadas, desde la época en la que te iniciaste en Superdeporte hasta la actualidad?

Claramente a peor. Si la situación del periodismo en general es mala, la del deportivo me parece calamitosa. Creo que la prensa deportiva especializada ha perdido la cabeza. Tenemos tertulias estilo Sálvame en televisión, con contertulios que llegan a las manos o presuntos periodistas de bufanda haciendo el ridículo en directo, y tenemos periódicos que se pasan el día publicando titulares engañosos para atraer el pinchazo, que cuelan contenido que poco o nada tienen que ver con el deporte. Todo por la audiencia. Creo que el último reducto del periodismo deportivo está en algunos formatos de radio, en la prensa generalista, que conserva grandes firmas, y en medios más minoritarios, en revistas como Panenka o Líbero, que son una maravilla.

¿Alguna cosa más que desees añadir?

Que, pese a todo, este sigue siendo el mejor oficio del mundo. Mientras dure.

Escrito por @casas_castro
Foto de Alberto Di Lolli
Centro Knight

Centro Knight, un defensor de la libertad de prensa y la democracia

El Centro Knight para el Periodismo en las Américas, ubicado en la Universidad de Texas, consiste en un programa de entrenamiento profesional de largo alcance para periodistas de Latinoamérica y el Caribe. Además, la institución también ayuda en la creación de organizaciones independientes de periodistas que tienen como objetivo elevar el nivel ético y profesional del periodismo y contribuir así a la libertad de prensa y la democracia.

En un contexto en el que la profesión se halla en plena transformación, los profesionales del periodismo deben adaptarse al uso de las  nuevas tecnologías de información y de comunicación, así como aprender a desarrollar de manera ingeniosa su marca con el objetivo de hacer atractivo su producto, es decir, su trabajo. El contenido periodístico digital está cada vez más orientado a satisfacer a la audiencia que consume noticias desde sus dispositivos móviles y desde las redes sociales.

En esta línea, el Centro Knight organizó el X Coloquio Iberoamericano de Periodismo Digital el pasado abril, en el que se trataron los casos de innovación y sustentabilidad en el periodismo de Iberoamérica, así como algunos casos españoles.

Uno de los participantes del encuentro fue el periodista español Borja Bergareche, director de innovación digital del Grupo Vocento de España. Bergareche contó los detalles del Proyecto Medusa, que consistía en el desarrollo de contenido exclusivo para los teléfonos móviles. Esta iniciativa ayuda a “experimentar con la obtención, tratamiento y reaprovechamiento de bases de datos para el desarrollo de productos editoriales que sean, por un lado, útiles para nuestros lectores y que no supongan un esfuerzo adicional a nuestras redacciones”, explicó.

Para ello se desarrolló una plataforma de tratamiento y reaprovechamiento automatizado de bases de datos con la que se producía, más tarde, el contenido periodístico. Es decir, a partir de la recolección de datos, la herramienta reúne información sobre un tema específico y es capaz de generar contenido de forma automática, sin que exista detrás el esfuerzo de una redacción. Uno de los productos de este proyecto fue “info-playas”, desde donde se pudo programar el envío automático de información: datos sobre el clima, las olas, el viento, las banderas, etc.

Este tipo de proyectos demuestran, una vez más, cómo el periodismo está reinventándose continuamente y que la ayuda de organismos como el Centro Knight es imprescindible para su correcto desarrollo.

Foto: Marga Ferrer

juan-nieto-ivars

“Un tuit puede despertar la curiosidad, pero sin contrastar no sirve para nada”

El periodista Juan Nieto Ivars (@JuanNietoIvars) explica para el lector de El Mundo, como él mismo define, “València en palabras”. O, más concretamente, qué se cuece en su política a través de su trabajo en Tribunales. Un profesional que da gran importancia al uso de las redes sociales, incluso, para contrastar informaciones con fuentes de interés, pero siempre sin perder de vista cuál debe ser el resultado final: una noticia rigurosa, veraz y de calidad.

¿Qué te impulsó a dedicarte al periodismo?

Como nos ha pasado a muchos, fue por vocación desde pequeño. Y, sobre todo, ser custodio de esos derechos que tenemos los periodistas de hacer noticias rigurosas y veraces para el lector. Que esté informado a través de tus informaciones. Me llamó mucho la atención.

Además de rigurosas y veraces, ¿qué otros adjetivos definen bien una práctica periodística de calidad?

Para hacer buen periodismo tienes que ejercer la profesión con muchísima pasión, trabajo y rigurosidad. Así serás un buen periodista.

¿Consideras imprescindible ser un periodista multitarea hoy para sobrevivir en la profesión?

Sí, totalmente. En cuestión de diez años hemos dado un salto importantísimo en la profesión y hoy se valora mucho que te sepas manejar en los nuevos entornos de comunicación como pueda ser el uso de redes sociales o trasladar de manera atractiva una información de papel a digital, ya que no requiere el mismo titular. No te puedes quedar anclado en el papel ni volcarte solo en lo digital, ya que si no la profesión pierde sentido. Debes adaptarte a tu entorno, en continuo reciclaje y sin miedo a lo nuevo.

¿Qué aporta a un periodista estar presente en las redes sociales?

Hay que ir con mucho cuidado en ellas, ya que tiene cosas buenas y malas, ya que es un gran contenedor de información que no está contrastada, de rumores que se elevan a la categoría de noticia. Siempre hay que tener la alarma puesta para que la información que encuentres en redes sea veraz. Pero en muchas ocasiones también he encontrado una gran noticia después de leer un tuit, a raíz de seguir a una persona que, por ejemplo, está en un partido político determinado, a la que puedes enviar un mensaje privado y establecer una comunicación. Ella te lleva a otras fuentes y la barrera se rompe. Así sí puede ser útil para la labor periodística. Sin caer en prejuicios, pero con cuidado. Ahora hay noticias de calidad en formato tuit y sería una insensatez mantenerte alejado de ello. Un tuit te puede despertar la curiosidad, pero sin contrastar no sirve para nada. Al igual que detrás de un gran dato puede estar una gran noticia.

¿Qué es lo más sorprendente que te has encontrado llevando Tribunales en El Mundo?

Cada día mi capacidad de sorpresa se regenera. Y eso es bueno, que el periodista no pierda esa inocencia del principio, porque eso va a hacer que te entregues y lo hagas todo con mucha pasión. A lo mejor un día informas sobre el caso Taula y me sorprendo de que se repartieran billetes de 500 euros en el Ayuntamiento de Valencia. En general lo que más me sorprende es la poca vergüenza con la que se hacían las cosas en la política valenciana hace unos años. Todo se hacía delante de nuestras narices y no nos esterábamos.

¿Cómo ves el panorama político valenciano actual y su tratamiento en los medios?

Estamos volviendo a la normalidad. Hemos vivido unos años entre 2011 y 2015 de sospecha permanente de cara a nuestros políticos. Y esta imagen ya se está perdiendo porque los dirigentes que se han visto salpicados por la corrupción ya no forman parte de la política valenciana. Sigue crispada, pero la relación periodista-político ya vuelve a ser normal, sin tantas sospechas.

Por @casas_castro
Premio Palabra Elsa González

El Premio Palabra, un galardón para el espíritu democrático

La Federación de Asociaciones de Periodistas de España junto con la  Fundación César Egido han desarrollado la primera edición del Premio Palabra. Este galardón tiene como fin conmemorar a todas aquellas personas e instituciones, tanto nacionales como internacionales, que a través del uso de la palabra hayan ayudado a fomentar la convivencia, la justicia o el desarrollo social y cultural, bien a través de los medios de comunicación o de cualquier otro medio de difusión.

La presidenta de la FAPE, Elsa González, nos aclara algunas dudas al respecto de esta nueva iniciativa.

¿Cómo surge este proyecto?

Lo propone la Fundación César Egido Serrano, a través de algunos periodistas. Una entidad que propone elevar el valor de la palabra como vínculo de la humanidad.

¿Qué objetivo perseguís con él?

Básicamente, el mismo objetivo que confluye en ambas organizaciones. El uso de la palabra como elemento para mejorar la sociedad y hacerla más justa.

¿Cuáles son los parámetros que impondréis para determinar al ganador?

La palabra como elemento de concordia que mejora a la humanidad.

¿Qué ha supuesto el surgimiento de nuevas plataformas de comunicación para la libertad de información y expresión?

Todo lo que suponga esfuerzo para fortalecer las libertades es importante y, como periodistas, esencial para el desarrollo de nuestro trabajo.

¿Cuán determinante pensáis que es el uso de la palabra para el correcto desarrollo de una democracia?

Vital. Es el arma de la paz en una democracia.

¿Creéis que hoy en día es más difícil hacer un buen uso de la palabra?

Con sus dificultades como en otros momentos. Aunque, ahora, el acceso al escenario público es más fácil gracias a las redes sociales. Asimismo, el receptor de los medios de comunicación ya no es un ser pasivo, forma parte del engranaje informativo.

¿Deberían establecerse también códigos deontológicos para aquellos métodos de difusión que no son estrictamente medios de comunicación?

Siempre está la Ley para frenar los abusos y creo que no se precisan más normas, solo aplicar las que existen. No obstante, creo en la autorregulación. Y es preciso, en una sociedad democrática, que se imponga el respeto a la dignidad del ser humano, su pensamiento y sus creencias, sin que eso suponga autocensura.

Como ves, la palabra es importante.

Sharon Reguera

Foto: Marga Ferrer

Comisión de Arbitraje, Quejas y Deontología del Periodismo

¿Qué es la Comisión de Arbitraje, Quejas y Deontología del Periodismo?

El estudio de los medios de comunicación y el periodismo en las escuelas fue una de las propuestas de la última edición de la Federación de Asociaciones de la Prensa en España (FAPE). Esta materia se impartiría en la ESO y tendría como principal objetivo que los jóvenes conocieran los conglomerados que hay detrás de aquello que ven en los programas de televisión, canales de radio o periódicos online –de papel los que menos-. También se explicaría el trato que se da a la información, qué es noticia y que no lo es, y el porqué de esta decisión.

Pero, sobre todo, los periodistas que componen la FAPE buscan que los jóvenes sean capaces de distinguir las noticias reales de los simples bulos. Buscan que, a partir del estudio de los Códigos Deontológicos que impone la Comisión de Arbitraje, Quejas y Deontología del Periodismo, los estudiantes sean capaces de desarrollar sus propios juicios sobre la realidad que les rodea. Pero, ¿quién es esta comisión que señala aquello que se supone correcto y lo que no?

Este órgano tiene como principal función velar por el control interno de la profesión periodística, desde la autonomía y la independencia. Y es que, no se ha de olvidar, que la profesión periodística en la democracia implica un compromiso social con la libertad de los ciudadanos y con el desarrollo de los derechos fundamentales de estos a través de la libertad de información y de expresión. Así, la Comisión de Arbitraje, Quejas y Deontología del Periodismo se compromete a “mantener, colectiva e individualmente, una intachable conducta en cuanto se refiere a la ética y la deontología de la información”.

La Comisión está integrada por personas, empresas y entidades pertenecientes a los campos del periodismo, del derecho, al mundo académico y a otras actividades relevantes de la vida social, todos ellos buscan proteger la esencia del periodismo y del periodista.

Sharon Reguera

Foto: Marga Ferrer

contenido-calidad-periodistas

“En España no hay actitud hacia la rectificación”

Josu Mezo, profesor de Sociología y de Ciencias Políticas en la Universidad de Castilla-La Mancha, denuncia cada errata, cada dato falso que se publica en la prensa y en los espacios digitales desde hace 13 años a través de Malaprensa, un blog pionero en España en la búsqueda de la corrección y de la rectificación de los medios de comunicación. Mezu considera que esto sí se sigue de manera más habitual en las grandes cabeceras estadounidenses e inglesas como The Economist o The Guardian, que toma como referencia para indicar lo que le gustaría encontrar en nuestro país.

¿Qué conceptos definen el buen ejercicio de la profesión periodística’

El rigor, la atención al detalle y la precisión para no equivocarse con los datos, aunque la mayoría de gente no le dé demasiada importancia y sí lo haga a la noticiabilidad.

¿Qué te llevó a crear Malaprensa hace 13 años?

Hablando con amigos llegamos a la conclusión de que la gente en España pensaba que los medios no hacían las cosas bien por temas de politización o de sensacionalismo, pero yo veía más problemas en cuestiones como el rigor o la precisión. Fuera de nuestro país sí que se corrigen los errores en los medios, pero aquí no. Por otro lado, crear un blog en aquella época era toda una novedad y para tratar temas como los míos, más todavía. Fue un experimento muy interesante.

¿Cuál es el principal error que encuentras en los medios a la hora de publicar sus informaciones?

Que tienen falta de recursos para verificar la información debido a las rutinas de creencia existentes sobre que lo que llega de una agencia de noticias o lo que dice una fuente de renombre se puede publicar sin más. No cuestionan cualquier información recibida u oída. De esa manera, se repiten constantemente datos sin contrastar en los medios, porque se fían. Hacer las cosas bien es cuestión de actitud, de formación (los periodistas se asustan cuando ven números) y de contar con tiempo para contrastar.

¿Esas ‘faltas’ suceden más en prensa o en medios digitales?

La prensa suele tener más cuidado, ya que cuando se publica no hay posibilidad de corregir en el momento, mientras que los medios digitales, unido a su falta de recursos, cuentan con la rapidez y a veces buscan el click fácil sin apenas contrastar. Sobre todo, se da más en las secciones de Economía y de Política, donde se manejan más datos. Además, a nivel general suele ser más grave un error en estas temáticas que en Deportes o en Cultura.

Eres profesor de Sociología y de Ciencias Políticas en la Universidad de Castilla-La Mancha, pero ¿te hubiera gustado ser periodista?

He colaborado en algunas cabeceras como crítico de medios y puede que hace 25 años me hubiera planteado serlo cuando no sabía qué hacer con mi vida. Ahora no, aunque a veces digo ‘estaría bien montar una alternativa’, viendo lo que se hace o lo que echo en falta en algunos medios. Pero yo lo veo todo desde la barrera, de manera idealizada, y no debe ser nada fácil.

Si pudieras trabajar en algún medio que cumpla con la corrección, ¿cuál sería?

Los extranjeros que suelo leer como The Guardian, The New York Times, Washington Post o The Economist, en los que se hace un periodismo que no se parece tanto al de Francia, Alemania o España. Son modelos de referencia con muchos recursos, pero también tienen una actitud hacia la rectificación que en nuestro país no existe, sobre todo, en temas como la corrupción. Corregir errores a posteriori no es una debilidad para los medios como se cree aquí, sino que refuerza la credibilidad y envía un mensaje de cumplimiento del deber con el lector.

¿Qué te gustaría ver en España en este sentido?

Por ejemplo, una edición en castellano de The Economist. Que, en general, se traiga la buena prensa extranjera a España.

LIBERTAD DE PRENSA

La situación de la libertad de prensa

Hoy, Día Mundial de la Libertad de Prensa, resultan estremecedores los datos recogidos por el ranking de Reporteros sin Fronteras que tiene como objetivo denunciar la falta de libertad, así como las agresiones y amenazas, que sufren los profesionales del periodismo. La falta de libertad a la hora de informar se creen propias de países como Siria, México o China, sin embargo son muchos los ciudadanos que desconocen como esta situación también está afectan a países de occidente, a la propia Unión Europea y a España.

La concentración de medios, la alarma social extendida sobre la amenaza yihadista y el reciente triunfo de Donald Trump han instaurado a la Unión Europea en una situación de alarma que ha llevado a que muchos países adopten medidas que atacan directamente a la libertad de prensa y dificultan el correcto trabajo de los periodistas. Ejemplo de ello son países como Reino Unido –puesto 40- el cual apRObó la Snopper Charter (Carta de los fisgones) con la cual es lícito interceptar los datos de millones de personas. Otro ejemplo es el caso alemán –puesto 16- donde se ha aprobado una ley a través de la cual se puede espiar tanto a periodistas nacionales como extranjeros. Este tipo de prácticas tienen un único fin: acabar con el periodismo de investigación y los problemas que este supone para las grandes potencias.

Sin duda, el miedo a los atentados terroristas ha sido clave para el desarrollo de este tipo de prácticas. Amparados por este temor, los países de occidente se han resguardado en la búsqueda de una mayor seguridad para proclamar leyes que van en contra de los principios de una democracia, así como de la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Otro ejemplo: la Eurocámara ha aprobado una Directiva de Secretos Comerciales que impone la obligación de periodistas y fuentes a demostrar que la información que se pretende publicar corresponde a un “a un bien público”.

En cuanto a España –puesto 29-  la situación que vive el periodismo es alarmante e inconcebible para los profesionales. A una limitada Ley de Transparencia, se suma la manipulación y censura de los entes públicos –así como el uso de los medios de comunicación de los que estos disponen- o la concentración del mercado periodístico de masas en unos pocos.

Es evidente que la lucha por la libertad de prensa es una tarea que atañe a todos los países, no solo a aquellos que los medios occidentales enjuician y presentan como lo erróneo.

Sharon Reguera

Foto: Marga Ferrer