Turisme Carraixet ya es una realidad como destino turístico complementario a Valencia. Carraixet, Turisme de l’Horta es la vitola con la que llega a su primera temporada turística, con el afán de ser un punto de evasión del entorno urbano con los alicientes que ofrece a quienes buscan una forma ‘slow’ de disfrutar de su tiempo libre.
La nueva marca turística, que abarca una superficie de 23 kilómetros cuadrados, fundamenta su fortaleza en el cicloturismo, el senderismo, la gastronomía de la huerta y el patrimonio cultural que albergan los municipios de Alfara del Patriarca, Bonrepòs i Mirambell, Foios, Vinalesa, Albalat dels Sorells, Almàssera y Meliana.
“Quien quiera huir, en bicicleta o a pie, del ruido de la ciudad; encontrar tranquilidad, conectar con la naturaleza; conocer el ciclo de la vida de la huerta y probar sus productos en rincones únicos de la gastronomía de kilómetro 0, tiene la oportunidad de hacerlo en Carraixet”, explican desde la entidad.
Portal de Turismo Carraixet y vídeo ‘slow’ del destino
El lanzamiento de Turisme Carraixet como destino de facto, coincide con la publicación de su portal web, Turismecarraixet.com y la edición de un vídeo, también ‘slow’, que recoge los principales hitos del destino turístico complementario a Valencia.
Así, la página incluye una propuesta de rutas cicloturistas, impulsando la bicicleta como el medio de transporte oficial de la huerta; el Club Tastem l’Horta, para enfocar los bares y restaurantes de la zona y las materias primas que recogen directamente de la huerta; y experiencias a pie de campo.
Unas experiencias abiertas por entidades, personas y firmas autóctonas del enclave colaboradoras con la entidad para que el turista “sienta la cercanía de la tierra, el mar y el sabor de las tradiciones más arraigadas, de su cultura y folclore”. En este sentido, “los turistas ya pueden alargar su estancia en este enclave natural y sostenible adaptado al contexto actual de nueva normalidad de la Covid-19”, subrayan.
Decálogo para un turismo responsable en la era Covid-19
La entidad ha adaptado también un código ético para el turista que visite las zonas propuestas de la huerta para complementar la visita a Valencia. “Principalmente, queremos apelar al sentido común y a la responsabilidad individual de las personas, para conseguir que la nueva situación tras el estado de alarma se prolongue lo máximo posible”, indican desde Turisme Carraixet.
Acudir a los enclaves de la Huerta con vocación de integrarse en la cultura de la huerta; respetar la actividad agrícola de la zona y comprender al agricultor; apostar por el silencio; mantener el entorno limpio y sin restos como mascarillas, colillas o guantes; recoger los residuos para devolverlos a su lugar de procedencia; procurar seguir los itinerarios marcados sin salirse de los caminos; y compartir con respeto y educación los espacios comunes con ánimo de compartir una experiencia única. Estos son los puntos más destacados del decálogo impulsado por Carraixet, Turisme de l’Horta para comenzar la nueva normalidad.
Club de producto gastronómico
Tastem l’Horta es el club de producto gastronómico que impulsa la nueva marca turística para realzar de cara al turista la importancia de los bares y restaurantes del Carraixet dedicados a la gastronomía y a su materia prima. “El club se centra en una primera etapa en ellos, mientras que en las siguientes etapas de trabajo daremos cabida también al resto de actores que forman parte de la cadena de valor de la huerta valenciana, desde el productor agrícola hasta su transformación gastronómica”.
Así, Ca Pepico, El Racó, Ca Xoret, El Celler de Jadelu, Lluna de València y la Barraca de Toni Montoliu son los restaurantes que componen la primera oferta gastronómica conjunta incluida en Tastem l’Horta como “embajadores de la cocina de la Huerta, con producto agrícola de kilómetro cero para una gastronomía de calidad”.
‘Slow bike’ y senderismo
Carraixet. Turisme de l’Horta presenta como otra de sus singularidades el turismo ‘slow bike’, con el que potencia numerosas rutas de cicloturismo y senderismo por la Huerta valenciana. “Es un turismo activo no tanto de cuentakilómetros y pulsaciones como de levantar la cabeza del manillar y disfrutar del cambiante paisaje de la Huerta”.
Destacan la ruta del Camins del Carraixet, con 28 kilómetros que permiten conectar con la huerta apreciando un paisaje diferente y único a pocos kilómetros de Valencia; la Vía Churra, una ruta de 15 kilómetros por el trazado del antiguo ferrocarril que es una de las rutas más atractivas y transitadas de l’Horta; o el Anillo Verde, una vía cicloturista de 52km que recorre el área metropolitana de Valencia y que en su zona norte conecta la huerta con el mar a través de caminos históricos y naturales.
Experiencias y narraciones personales
Por último, las experiencias a pie de campo. “Que el turista se empape de la singularidad del entorno, de los oficios tradicionales, de cómo se producen productos a pie del Mediterráneo y qué personas son las encargadas de llevarlos de la huerta a la mesa”. Son atractivos esenciales de este destino complementario a Valencia.